viernes, octubre 14, 2005

Carta de un maracucho en caracas!

Querido Padre (Ción, Papi),

Recibe un caluroso saludo (¿Cómostái?). Dale a mamá un beso de mi parte (saludáme a mamá y decíle que la bendición).

Te escribo para contarte como ha cambiado mi vida desde que salí de nuestra Maracaibo adorada (te escribo pa'que sepáis como es la vaina por aquí). Fue fuerte al principio, pero he logrado adaptarme (fue arrecho y me costó que jode, pero ya le agarré la vuelta a la vaina).

Mi jefe es una persona muy seria (el jefe anda siempre con cara'e culo) y los compañeros son un poco selectivos para tratar a nuevas personas (y todos los demás son unos envidiosos, coños'e madres); por si fuera poco (pa completár), mi compañero de oficina es detallista y fanático de la moda (me tocó un marico enfrente), pero le he hecho notar que no estoy interesado en su estilo de vida (ya le dije que a mi no me venga con mariqueras), para evitar malos entendidos y no tener confrontaciones (pa no tener que entrále a coñazos). Dado que el sueldo es un poco reducido (como en esta mierda no pagan un coño), he contactado a un directivo (ya cuadré con un chivo) para realizar actividades especiales (pa'rebuscame algo, matando tigritos) y así poder ganar algo de dinero extra (y metéme unos cobritos).

La comida no es tan sabrosa como la de la casa (la comía es una mierda), tanto que me produjo dolores estomacales (imagináte que me dio retorcijones) y estuve indispuesto algunos días (y tenía cagalera), con síntomas de diarrea (con la mierda flojiiiita). La vida nocturna es fabulosa (las rumbas son arrechísimas), se prolonga hasta altas horas de la noche (amanezco toitos los días) y me acuesto muy contento (y caigo en la cama guerto verga).

Un compañero me presentó a una colega (un pana me pichó una caraja), muy simpática (más buena qu'er coño). Ella es alta (es mamarrua la coño'e madre), cabello castaño con reflejos (tiene las mechas pinturretiaas), tiene un cuerpo voluptuoso (tetona la mardita), y caderas prominentes (y culona). Estuvimos conversando (me la cotorrié) y al parecer congeniamos (y ya la tengo controlá). Me platicó acerca de sus ideales (es bruta la desgraciá) y pude notar que es un poco inmadura (y mente'e pollo, verga), aunque acotó que le gustan las relaciones modernas y liberales (es echá pa'lante la puta); y comentó de sus infructuosas relaciones anteriores (y culiooona...) y que espera que nuestra relación progrese (y quiere que le dé julepe), pero, como sabes, soy cuidadoso y precavido (pero, vosabei, yo no soy güebón, me pongo mi gorrito), siempre pensando en el futuro (pa'que no me encasqueten ningún coñito).

Padre, me despido (bueno, ya sabei), esperando que en mi próxima visita podamos compartir momentos agradables (espero que cuando vaya nos la peguemos) y muy fructíferos (y nos vorvamos verga).

Joseph (Chicho)


Correo enviado por: ALBERTO CALDERON